Marvel Girls Variations

Como cuando pintabas dientes negros y bigotes en el Hola!


#SelectorDeFrecuencias: Black On Black - Dalbello


Súper mami fit (by Melgui Fresh)

Que sí, que no te digo que no. Ser portada de la revista Women´s Health a los cinco meses de dar a la luz a un segundo hijo tiene mucho mérito. Pero te invito a no quedarte en lo superficial, te animo a que rasques en los abdominales y a ver que encuentras debajo… ¿Tiempo y más tiempo? Que sí, las cosas como son.



¡Susi, cariño, estás estupenda! Cuánto me alegro de que la faja vulkan haya cumplido su cometido. A ver, no estoy del todo mal pero aún me siguen sobrando siete kilos. Bueno, nueve. Lo que veo complicado es llegar al bikini, me temo que este año voy a tener que unirme a la liga del bañador. Menos mal que ahora vuelven a ser tendencia. ¡Y qué buena cara tienes! Mañana vuelvo a echarme la mascarilla a base de yogur natural sin falta. Será por yogures. Lo que no sé es si me queda algún pepino. Mira que no confiaba mucho en el potingue a pesar de que mi madre me lo puso por las nubes pero si ha conseguido disimular que duermo una media de cuatro horas diarias, ¡bendito sea! ¿Cómo has conseguido recuperarte así de bien? ¿De dónde sacas el tiempo? Hija, qué gusto. Pues a ver, entre la primera toma de las 6 de la mañana y la preparación del desayuno para el resto, me da tiempo de hacerme una serie de abdominales y pegarme una ducha de 4 minutos. Si toca mascarilla, tengo que prescindir de las lumbares. La tonificación de los brazos está cubierta en el momento de acoplar todos los elementos en el coche de camino a la guarde. Ajustar el cuco siempre me da problemas así que, casi siempre, hago un sobreesfuerzo. Como siempre llegamos tarde, hago doble sprint: de ida y de vuelta. El equilibrio lo ejercito cuando llego a casa si tengo suerte de que el pequeño duerma, claro. Con tal de que no se despierte, hago las tareas como una auténtica contorsionista. Después de comer, llega el turno del yoga: cierro los ojos e intento descansar sin dormirme, hasta que el profesor me anima a dejar de meditar con uno de sus berridos. Y la tarde está reservada a los deportes de equipo, el hermano mayor del instructor de yoga es futbolista y yo su entrenador. Y, ahora que te has incorporado al trabajo ¿cómo lo vas a hacer? Pues cómo va a ser, renunciando al deporte. Igual me he pasado y nueve kilos son demasiados. Con la mitad me sirve.

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