Cierra la ventana (un relato de Noel Leon)

Los relatos de Noel Leon en LasMilVidas están teniendo mucha aceptación con lo que vuelve esta semana para advertirles de que aunque haga calorcito primaveral, deben tener cuidado con lo que entra por la ventana...

Cierra la Ventana

Photo Credit: Phil Roeder via Compfight cc

El sonido de un golpe seco proveniente del salón donde se encontraba él, la hizo despertar del mundo que el libro que leía le ofrecía, la verdad es que llevaba mucho tiempo leyendo y pensó que le vendría bien un paseo, y también un abrazo de él. Así que se dirigió al salón con ese propósito además de él de curiosear acerca del golpe que la había sobresaltado.

Al entrar en el salón lo encontró a él, con el arma en la mano, de pie, inmóvil mirando al suelo, junto a la ventana. Sin embargo no fue el arma lo que llamó su atención, sino la ventana que conectaba con el jardín por la que entraban los rayos del sol y una brisa lejana de ser fresca. Era raro que la ventana estuviera abierta, porque habían acordado dejarla cerrada hasta que acabaran las vacaciones. No era la primera vez que entraban en casa aprovechando la temporada de verano. La verdad es que estaba siendo una temporada especialmente problemática en el barrio en ese aspecto.

¿Qué hace la ventana abierta? – Dijo, mientras él seguía inmóvil mirando al suelo, con el arma en la mano, fue en ese momento cuando se percato de ello y se acerco a él colocándose a su espalda, abrazándolo por la cintura y poniéndose de puntillas asomo la cabeza sobre su hombro derecho para vislumbrar el cadáver en el suelo. Si te fijabas lo suficiente todavía podía ver pequeñas convulsiones del cuerpo, se podría decir que aun quedaba una pizca de vida en él, pero estaba claro que no había nada que hacer para evitar su entrada en la oscuridad final. Sin duda había intentado entrar por la ventana, y él se lo había impedido con un golpe seco, el que había producido el ruido, ahora el cadáver estaba ahí tendido, y aunque por esta vez parecían haberse librado de su incomoda presencia, no parecía probable que esto fuera a ser una autentica advertencia para el resto.

Él se libero de su abrazo con una caricia en el brazo que era mas una forma de pedir permiso para separarse que una autentica caricia, y ella se lo permitió para que él se encargara del cuerpo. Se agachó para recogerlo y sacarlo a través de la ventana al jardín, donde lo dejo caer para cerrar la ventana inmediatamente después.

Ella volvió a abrazarlo, le beso en el cuello y le susurro al oído:

- Cariño me he aburrido de leer ¿Por qué no vienes a la cama y me haces un poco de compañía?- Le cogió la mano y le arrastro hasta la cama donde se dejo caer aun manteniendo la unión con la mano, y con los ojos. El rompió por unos segundos ambos vínculos para agacharse y recoger el auyentamosquitos eléctrico que estaba en el suelo junto al enchufe, para conectarlo mientras decía:

- Este está siendo un verano terrible con tanto bicho.